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Poemario «Habitantes de un paraíso minúsculo» (2022)

Habitantes de un paraíso minúsculo es mi segundo libro publicado. 

Es un poemario acerca de:

Portada poemario "Habitantes de un paraíso minúsculo"
La fragilidad de los amantes, la incursión en un deseo que, más allá de aquello que anhelamos, nos conduce al paraíso, siempre minúsculo. Los cuarenta poemas que componen «Habitantes de un paraíso minúsculo» oscilan entre la necesidad íntima del encuentro con el otro y la de mantener la esencia de quienes somos

Vertebrado a partir de una historia de amor que transita desde la ausencia hasta el encuentro, el poemario nos invita a sumergirnos en los distintos matices de la vivencia amorosa ─los múltiples dolores de la ausencia, el valor de la incertidumbre, la derrota temporal, la persistencia, las certezas íntimas, el coraje de aventurarse─, rasgando las fronteras entre sus tres componentes: tú, yo y nosotros. 

Se desprende, finalmente, la convicción de que para amar bien, hay que ser valiente

El poemario salió al mundo en 2022...

y fue premiado en el II Certamen de Poesía de La Equilibrista en 2020 (lee la alegre noticia en este post). Ahora lo tenemos aquí, habitando entre nosotros.  

Puedes conseguirlo...

en librerías o por la página web de la editorial La Equilibrista (impreso o en epub)
encargándomelo directamente a mí.

Disponible el poemario "Habitantes de un paraíso minúsculo"


Antes de leer o comprar el poemario, puedes leer el primer poema, "Cuando ya no esté aquí", o escucharlo: 




Comentarios



LA VERDAD QUE NO VEMOS

No, no quiero los sueños. Es la vida,
la realidad la que nos llama. Escucha.
Leopoldo de Luis

Deja que te lo explique, no en palabras
— que con palabras no se entiende a nadie —
sino a mi modo oscuro, que es el claro.
Mirta Aguirre

 

Está aquí, déjame que te lo muestre,
en este pequeño espacio de aire,
esta dimensión, toda esta anchura
de trazas, de briznas
aciculares, está en esta brisa ingenua
que tanteo con los dedos,
que trato de asir para hacer mía,
es de sí misma,
                              está aquí.


Está en este soplo hecho de desgarros,
está en el lápiz que me cae de las manos
si abro la palma,
está en esta corriente alterna,
está en genios y mediocres,
en las nubes de las partículas,
en las ínfulas extrañas
y en el pliegue de las alas de un cóndor negro,
en la precipitación de un vidrio
que no nos hiere apenas
y en los resquicios invisibles
de nuestras cicatrices más finas,
está en el cieno de los ríos
que arrastras a las cimas,
en la cima lozana
que hallas en la mirada,
las miradas tiernas
que no adviertes,
y las que adviertes,
                                está aquí,
no puede estar en ningún otro lado.


La recogemos,
este soplo que resollamos
está hecho de ella.
Este vasto espacio que media
entre tú y yo,
los lugares entre nosotros
que no habitamos
y que alcanzamos al vuelo
con esfuerzo
y devoción de céfiro,
la verdad es que es esto,
está aquí.